
Proyecto creativo urbano-artístico | AOIZ Navarra
Cliente: Ayuntamiento de Aoiz
Fecha:2006
Localización: España
Aoiz es una pequeña población que ha crecido en muy poco tiempo y que va a crecer más en los próximos años. Es una ciudad que fue el centro neurálgico y administrativo de una zona de Navarra. Pero que tras la crisis de los 70, estuvo en retroceso durante años, hasta la
llegada del pantano de Itoiz. Tras su construcción, Aoiz ha comenzado a crecer; en la actualidad cuenta con poco más de dos mil habitantes, pero a lo largo de los próximos años puede que llegue a los tres mil quinientos, e incluso a medio plazo aproximarse a los siete mil.
A lo largo de muchos años, la carretera que le atravesaba ha sido el nudo gordiano de lo que fue la ciudad, hasta el punto de pensar en una ciudad-carretera: En ella está la iglesia, el ayuntamiento, los bancos, el juzgado, la plaza mayor, el restaurante más importante…,
prácticamente todo aquello que entraña relaciones sociales en Aoiz. Pero tras la construcción del Pantano de Itoiz, la carretera ha perdido el sentido de travesía, los coches ya sólo la atraviesan para ir al dique del pantano.
Este proyecto gira en torno a qué y cómo va a ser en adelante esta travesía, teniendo en cuenta que va a continuar siendo la arteria central de Aoiz: seguirá siendo un distribuidor, puesto que se abre hacia el río, hacia el caserío interior, hacia las nuevas urbanizaciones, y hacia el dique. Aunque esta función distribuidora ya no va a ser tanto al servicio del
automóvil como de todo lo que implica movilidad en la ciudad, y en la que las personas van a tener mucha mayor importancia que hasta ahora.
llegada del pantano de Itoiz. Tras su construcción, Aoiz ha comenzado a crecer; en la actualidad cuenta con poco más de dos mil habitantes, pero a lo largo de los próximos años puede que llegue a los tres mil quinientos, e incluso a medio plazo aproximarse a los siete mil.
A lo largo de muchos años, la carretera que le atravesaba ha sido el nudo gordiano de lo que fue la ciudad, hasta el punto de pensar en una ciudad-carretera: En ella está la iglesia, el ayuntamiento, los bancos, el juzgado, la plaza mayor, el restaurante más importante…,
prácticamente todo aquello que entraña relaciones sociales en Aoiz. Pero tras la construcción del Pantano de Itoiz, la carretera ha perdido el sentido de travesía, los coches ya sólo la atraviesan para ir al dique del pantano.
Este proyecto gira en torno a qué y cómo va a ser en adelante esta travesía, teniendo en cuenta que va a continuar siendo la arteria central de Aoiz: seguirá siendo un distribuidor, puesto que se abre hacia el río, hacia el caserío interior, hacia las nuevas urbanizaciones, y hacia el dique. Aunque esta función distribuidora ya no va a ser tanto al servicio del
automóvil como de todo lo que implica movilidad en la ciudad, y en la que las personas van a tener mucha mayor importancia que hasta ahora.
El proyecto debe ser capaz de responder a dos cuestiones: Las necesidades relacionadas con la movilidad urbana como concepto para la peatonalización, teniendo en cuenta a su vez:
? Las funciones distribuidoras de la Avenida hacia los diversos espacios de la ciudad que parten de ella.
? Las necesidades comerciales, administrativas y de ocio y deporte.
? Las necesidades de representación social.
Y en segundo lugar, la constructora de un centro urbano para la ciudad, con rango suficiente como para servir de referente humano y físico, a una pequeña ciudad que aspira en los próximos años a doblar su número de habitantes, y en un futuro no muy lejano a
triplicarlos.
? Las funciones distribuidoras de la Avenida hacia los diversos espacios de la ciudad que parten de ella.
? Las necesidades comerciales, administrativas y de ocio y deporte.
? Las necesidades de representación social.
Y en segundo lugar, la constructora de un centro urbano para la ciudad, con rango suficiente como para servir de referente humano y físico, a una pequeña ciudad que aspira en los próximos años a doblar su número de habitantes, y en un futuro no muy lejano a
triplicarlos.
Concepto interpretativo, diseño artístico y urbanismo se unen para acometer estos desafíos.
Un clásico estudio alemán de Rolf Monhein sobre peatonalización dice que “una ciudad sin áreas peatonales representativas parece ahora desesperadamente anticuada”. La peatonalización es una técnica muy antigua, casi tanto como la presencia de automóviles en las ciudades. Desde entonces, las peatonalizaciones se han presentado en una gran variedad de fórmulas que atienden a distintos propósitos, desde las que únicamente se dedican a resolver puntualmente el conflicto entre peatones y vehículos, a las que buscan un nuevo modelo de accesibilidad y movilidad para el conjunto urbano. Pasando por modelos cuyo objetivo esencial es de tipo comercial, es decir, la configuración de un espacio propicio para el comercio.
Como dice ese mismo estudio alemán al que hacíamos referencia, el efecto más positivo de las peatonalizaciones es que «el área peatonal se ha convertido en un importante lugar de
aprendizaje de la vida urbana».
Para lograr este propósito en Aoiz, proponemos utilizar el arte público como elemento distintivo. Pero es importante entender que no pensamos en un arte público como simple elemento decorativo, como algo anecdótico. Sino como un arte que se pone al servicio de la construcción de ese centro.
Bataille decía, que “la arquitectura es la expresión del ser mismo de las sociedades, de la misma manera que la fisonomía humana es la expresión del ser de los individuos». Nosotros pensamos que esto es aplicable a los centros y a las ciudades: esos nodos centrales son la
expresión misma del ser de las ciudades. Y el ser no sólo está compuesto por lo exterior, hay una parte relacionada con el alma que sólo se puede llegar a percibir a través del arte. Así pues, ese es el trabajo del arte público en este trabajo, encargarse de sacar a la luz aquellas
partes que recojan en ese centro las partes relacionas con el alma de Aoiz.
Como dice ese mismo estudio alemán al que hacíamos referencia, el efecto más positivo de las peatonalizaciones es que «el área peatonal se ha convertido en un importante lugar de
aprendizaje de la vida urbana».
Para lograr este propósito en Aoiz, proponemos utilizar el arte público como elemento distintivo. Pero es importante entender que no pensamos en un arte público como simple elemento decorativo, como algo anecdótico. Sino como un arte que se pone al servicio de la construcción de ese centro.
Bataille decía, que “la arquitectura es la expresión del ser mismo de las sociedades, de la misma manera que la fisonomía humana es la expresión del ser de los individuos». Nosotros pensamos que esto es aplicable a los centros y a las ciudades: esos nodos centrales son la
expresión misma del ser de las ciudades. Y el ser no sólo está compuesto por lo exterior, hay una parte relacionada con el alma que sólo se puede llegar a percibir a través del arte. Así pues, ese es el trabajo del arte público en este trabajo, encargarse de sacar a la luz aquellas
partes que recojan en ese centro las partes relacionas con el alma de Aoiz.
Este proyecto se realiza en estrecha colaboración con la escultora especializada en arte urbano Esther Pizarro, conciliando la interpretación y conceptualización definida por ICN-Artea con su visión artística y creativa.